miércoles, 16 de julio de 2008

Sabe más Europa por vieja que por diablo.



















QUÉ ES EL MOVIMIENTO EUROPEO.










El Movimiento Europeo es una asociación sin ánimo de lucro que se distingue en su defensa de los valores del europeísmo y de la construcción europea.


EL MOVIMIENTO EUROPEO INTERNACIONAL




El Movimiento Europeo es una organización internacional abierta a todas las tendencias políticas, económicas, sociales y culturales de la Sociedad Civil. Su objetivo principal es el de promover y contribuir al establecimiento de una Europa unida y federal basada en el respeto a los derechos humanos, la paz, la democracia, la libertad y la participación ciudadana. Se funda en el Congreso de la Haya, cuyo Presidente de Honor fue Wiston Churchill, en mayo de 1948, sólo tres años después del final de la II Guerra Mundial. Han sido Presidentes del MEI grandes nombres del Europeísmo como Paul Henry Spaak, Robert Schuman o Valery Giscard D' Estaigne. En la actualidad cuenta con 39 secciones nacionales, que agrupan a los principales partidos políticos y asociaciones civiles europeas.Su página web actual es http://www.europeanmovement.org/.

EL CONSEJO FEDERAL ESPAÑOL DEL MOVIMIENTO EUROPEO.

El Consejo Federal Español del Movimiento Europeo, una de estas 39 secciones, Constituido en febrero de 1949 en el número 11 de la Avenue Marceau de París, como sección española del Movimiento Europeo Internacional, el Consejo Federal Español del Movimiento Europeo integró, junto a partidos políticos en el exilio y de ámbito nacional, otras entidades específicas como el Consejo Vasco y el Consejo Catalán del Movimiento Europeo. El CFEME desarrolló en esa época y desde el exilio una política alternativa que cifraba en la unidad europea el camino para poner fin a la dictadura, reimplantar la democracia en España y procurar su desarrollo económico y social.Estableció los contactos con las entidades europeístas y organizaciones políticas existentes en el interior que posibilitaran la reunión de Munich entre la oposición interior y exterior, en junio de 1962, y que desataron una espiral de represión contra los participantes en el llamado "Contubernio" con grandes repercusiones tanto en el plano internacional como en el plano interno, marcando el camino a seguir en la recuperación de las libertades democráticas.Legalizadas sus actividades en España desde 1978, el CFEME encamina su actuación de una parte a propiciar el desarrollo de una identidad europea y unos valores comunes en la sociedad española, y, de otra, posibilitar que entre las instituciones, las fuerzas políticas y las organizaciones socioeconómicas, España sea un factor dinamizador en el proceso de construcción europea.Desde la instauración de la democracia, el CFEME ha contado con el apoyo de las Administraciones públicas y particularmente del Ministerio de Asuntos Exteriores, de las Comunidades Autónomas para los Consejos correspondientes y con el patrocinio de entidades privadas. Asimismo, muchas de sus actividades se realizan en colaboración con la Representación en España de la Comisión Europea y la Oficina en España del Parlamento Europeo.Integran el CFEME los Consejos de las Comunidades Autónomas, partidos políticos, organizaciones socioeconómicas y municipales, centrales sindicales, entidades socioprofesionales y asociaciones procedentes del periodismo o la universidad junto a numerosas entidades ciudadanas con vocación europeísta, representantes de la sociedad civil.El CFEME participa en los programas del Movimiento Europeo Internacional, en acciones impulsadas desde las Instituciones de la Unión Europea, así como en todo tipo de actuaciones propiciadas por la sociedad civil. En esta dirección, coordina en España los trabajos realizados por "Forum Permanente de la Sociedad Civil Europea".


euronews 17-07-08


Todas las variables que pueden darse en una agrupación humana han ocurrido en Europa a lo largo de su historia. Pero sin lugar a dudas el momento actual es uno de los tres o cuatro más importantes, opinión personal, junto con todo el siglo XVII y la primera guerra mundial, con la desintegración del imperio austrohúngaro.





En este momento de asentamiento económico, aunque la impresión sea la contraria, aquellos países motores, en su afán de control de las otras economías, están poniendo a la Unión Europea en el buen camino, aunque nacionalismos insolventes, como Irlanda, o la bipolar Polonia, intenten hacerse ver.
Sentarse en el Parlamento Europeo y presenciar una jornada parlamentaria tiene momentos de éxtasis, pues la manera de hacer política, con una oratoria repleta de conciencia filosófica y visión global, se encuentra en pocos foros. Hay políticos realmente brillantes.
Sin olvidar que el lenguaje político es ampuloso y lleno de trucos, tienes la sensación de que son ellos los que han creado el otro del mundo, y si te desvías de sus propuestas, avaladas por consejos de sabios, tropezaras.
El Movimiento Europeo esta plagado de propuestas y mis observaciones sobre sus trabajo me llevan a apuntarles como una agencia trasnacional de encuestas de opinión y sondeo de necesidades, para impulsar el sentimiento de necesidad de ser un solo ente, concretando los resultados que surgen de sus estudios de campo.
La inicial tormenta de ideas del grupo de trabajo, no cae en saco roto y van conformando una lista de prioridades que abarcan desde el corazón europeo hasta los países frontera con otras uniones, sin olvidar a los que desean unirse, priorizando un estereotipo de derechos humanos y prevalencias de gestión económica.
Digo sí a Europa , casi punto por punto, aunque juegue a las cuotas de máximos rigores, como la inmigración o la ampliación de la jornada laboral, pero la flexibilización y el sentido común, abre la mano, tras la reflexión y el debate, a la opinión del ciudadano que participa en la recogida de datos, haciendo de servicio de información de la conciencia democrática.
Europa for ever.


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